El futuro que depara la tecnología
Hoy es posible replicar el comportamiento de los humanos a través de la automatización por medio del RPA, podemos imitar la interacción que realizan las personas en los medios digitales de informática.
La reducción del tiempo, aligerar las cargas de trabajo, la fiabilidad de los datos recopilados, la reducción de los costos y la eliminación de los errores, han determinado que las empresas e instituciones opten por la automatización de procesos con fines de rendimiento, eficacia y evitar cargar a las personas de las tareas repetitivas y rutinarias.
Hoy los robots de software son capaces de ejecutar apps, gestionar archivos, completar datos de planillas, reconocer información en documentos de textos, digitales o manuscritos, reconocimiento de información biométrica, entre muchas otras. Las posibilidades son muchas y han dado paso a la liberación del tiempo a los humanos para realizar actividades de mayor valor.
En la actualidad
El mercado global, en términos de automatizaciones, ha experimentado un crecimiento significativo, donde se espera que para el año 2023, la mayoría de las empresas e instituciones estén utilizando estas tecnologías, alcanzando un gasto en automatización de alrededor de los 10.400 millones de dólares.
Si bien la proyección de gastos en inversión tecnológica se reparten entre Procesos inteligentes de automatización (IPA), Inteligencia Artificial y RPA, el crecimiento que experimentará esta última es alrededor de del 50% solo en tres años.
El contexto Covid-19, ha generado que más mercados se apresuren a estas transformaciones tecnológicas, dado que el distanciamiento, los aforos y las distintas urgencias han requerido la reducción de costos, agilizar labores, evitar errores e innovación de procesos.
Los periodos difíciles o de crisis son el mejor momento para pensar bien y replantearse ciertas situaciones que nos lleven a utilizar nuestro ingenio para salir adelante y no decaer. Volver a la normalidad de esta pandemia, no será como si nada hubiese pasado, ya transformó nuestra realidad, nuestra conducta, también los mercados y los trabajos.
Tendremos que aceptar los cambios para mantenernos en el mercado y la adopción de las tecnologías de RPA pueden hacer que las instituciones, empresas e industrias se hagan más sólidas para soportar los embates de las crisis (de cualquier tipo), ya que nos permite proyecciones en el futuro considerando los distintos y adversos escenarios.
RPA post Covid
Si bien aparentemente estamos saliendo adelante de esta pandemia, que nos dejó recluidos y con miedo; avanzar hasta la normalidad ha sido en gran parte gracias a la adopción de las tecnologías de RPA, que ha hecho manejo importante de los procesos hospitalarios, que evitaron la saturación del sistema.
La tecnología ha quedado implementada, volver a la normalidad no significa retroceder hasta el punto anterior, antes de la pandemia. Hoy debemos seguir avanzando para que cada vez más procesos digitales puedan estar a cargo de la automatización, por todos los beneficios que esta entrega. Las instituciones de salud también juegan un rol importante en la Transformación Digital del mundo.
Los beneficios que hoy ya podemos apreciar de las RPA en salud: Gestión de grandes volúmenes de solicitudes de test, agiliza el ingreso de los pacientes, evita los errores cometidos por los profesionales, así mismo los libera de las labores administrativas y de logística, para que puedan dedicarse netamente a su función esencial.
Sin duda son muchas las aplicaciones que las RPA pueden tener en el mundo de la salud, como apoyo en los call center, que reduce el tiempo de espera; acceso a los datos de los pacientes; capacitación remota de personal, entre otras.
RPA en todos sectores
Las RPAs pueden amoldarse a los distintos mercados e industrias, en empresas de distintas magnitudes, cubriendo las más diversas necesidades, en cada rubro podría acogerse la automatización de procesos. El mundo se está reorganizando ante la vorágine de un mundo que cambia.
Agilizar los tiempos de respuestas, el trabajo administrativo, el teletrabajo, el e-learning, la atención a clientes, asistencias remotas, el sistema público, las universidades, el rubro de la construcción; en buenas cuentas, todas las actividades que presenten procesos digitales son candidatos a automatizarse.
Los beneficios son rápidos, son fiables, la seguridad es otorgada por el sistema que se protege a sí mismo al no pasar por las manos y ojos humanos. El alcance es arrollador. El cambio está en la actitud e intención de organizar y no temer a estas iniciativas.
Próximamente gran parte de las interacciones serán llevadas por la robotización; no se perderán los trabajos, sino que nos haremos responsables de llevar a plenitud las potencialidades personales. Nuestra actividad laboral se hará más grata y ganaremos tiempo para compartir con los nuestros. Nuestro trabajo humano será valorado como esencial.